24 octubre, 2007

Amanecer claro


El amanecer claro me deslumbró.
Fue rápido y en el momento
por lo que fue tal mi asombro
que caminé siguiendo un único movimiento.


Dubitativo y decidido andaba,
mi alma y mis pies seguían la senda
que por segundos tanto me asombraba
apreciando lo mejor de la vida, la guinda.


El amanecer jugaba con colores naranjas y amarillos,
mezclaba olores de incienso y azahar,
cantaba como el más sonriente grillo
y solo buscaba caminar y volar.


Su pasión no es de color de rosa,
el color de rosa nace de su pasión
igual que la más dulce y asombrosa
nota de una inolvidable canción.


Los ojos avivan mi sentir,
verde albahaca, verde tuyo,
que aman y buscan escapar del barullo
para así encandilar al elixir.


Amanece claro hasta de noche,
donde la oscuridad se vuelve clara
y surge el deseo de un derroche
interior tan grande que todo lo callara.


La única verdad es la del corazón
cuando amanece claro y libre,
ya que tú, claridad, eres amor y pasión,
sentimiento, alegría, vida, tú.

03 octubre, 2007

Historia de un secreto


Me descuidé...
Por eso es un secreto,
que solo saben mi savia y tú.


Un día de sol, con nombre y apellidos,
me bronceó las raíces,
me floreció en primavera y cultivó mi serenidad.


Cuando te veo...brotan 1.000 hojas nuevas,
cuando me besas...mi tallo se convierte en plastilina,
mis raíces quieren salir de la tierra para juntarse con el tallo
y las hojas se ponen rojas de placidez.


Agua, agüita para mí, ¿sabes?
El secreto queda guardado en mis raíces,
cerca de todo, lejos de nada,
ya que tú eres tierra y agua, sol y aire.


Seré la planta que se convierta en canción,
las más bellas e inesperadas notas en la historia...
en la historia de nuestro secreto.