28 noviembre, 2010

El reloj de mi vida

 


 El corazón de mi alma tictaquea el tiempo que tú no estás.
Monotoniza la respiración y la normaliza en su frecuencia.
Aviva los ojos infantiles y motoriza las palabras.
Todo ello con mi función biológica de hablar de tí.

El tiempo que estás el corazón de mi alma se frena en seco,

la respiración muere, los ojos se tapan y
las palabras se callan, se quedan latentes.
Todo ello con la función biológica de amarte. 

2 comentarios:

  1. a ver si esta vez me deja publicarlo..jum!
    me parece preciosa, me dejo sin palabras unos días antes de firmarte, y cuando por fin me decidí a hacerlo va y no te sale!
    pero aquí lo tienes. me encanta :)

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