03 octubre, 2007

Historia de un secreto


Me descuidé...
Por eso es un secreto,
que solo saben mi savia y tú.


Un día de sol, con nombre y apellidos,
me bronceó las raíces,
me floreció en primavera y cultivó mi serenidad.


Cuando te veo...brotan 1.000 hojas nuevas,
cuando me besas...mi tallo se convierte en plastilina,
mis raíces quieren salir de la tierra para juntarse con el tallo
y las hojas se ponen rojas de placidez.


Agua, agüita para mí, ¿sabes?
El secreto queda guardado en mis raíces,
cerca de todo, lejos de nada,
ya que tú eres tierra y agua, sol y aire.


Seré la planta que se convierta en canción,
las más bellas e inesperadas notas en la historia...
en la historia de nuestro secreto.

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